MIR
Primero era tan dulce que te empalagaba a veces
Intenté agriarme un poco y me llamaste dura
Si la realidad te lastimaba, a malvada descendía
De tanto consentirte me convertí con creces
En sobreprotectora: asfixia pura.
Ahora era igual que tú. De pronto en nada coincidía
Así fui confundida a lo largo de los meses
Ora dramática. Ora paladín de la mesura
Un día sobraba y al siguiente falta te hacía
De ti tuve tantos reclamos , tantos jueces
Que me vi obligada a cuidar de mi cordura
Ayer nomás, la madeja deshacía
Dejé irse a los destratos, los reveses
La miel y la hiel. Ayer todo moría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario